La presencia en nuestras calles de coches con una caja de cambios automática se ha
multiplicado en el último lustro. Cada vez más fabricantes apuestan por los coches
automáticos frente a los tradicionales coches manuales. Es una tendencia que ha llegado
para quedarse y que se volverá mucho más frecuente en los próximos años.
Si para el año 2017, solo 1 de cada 10 coches que se comercializaban en España contaba
con una caja de cambios automática; en la actualidad el porcentaje se ha triplicado y
supone ya el 31 % de los coches comercializados en nuestro país. Todo indica que
esto seguirá siendo así y que el porcentaje seguirá creciendo hasta ocupar la mayor parte
del mercado.
Así ha ocurrido en los Estados Unidos, donde en la actualidad solo 1 de cada 8 vehículos
a la venta dispone de una caja de cambios manual. Es una tendencia generalizada en
todo el mundo y por todo tipo de fabricantes y que ha sido motivada, entre otros factores,
por la mayor difusión de coches eléctricos e híbridos en el mercado.
Ventajas de los coches automáticos
En Buitrago Centros hemos tratado de recopilar cuáles son las principales ventajas que
detectamos en los coches con cajas de cambio automáticas frente a los manuales.
Algunas de las más interesantes son las que mostramos a continuación:
Mayor comodidad
Las transmisiones automáticas resultan más cómodas de utilizar, sobre todo para aquellos
conductores que pasan mucho tiempo conduciendo por la ciudad o en atascos. Al no
existir la palanca de cambios o el tercer pedal, el conductor tan solo tiene que
preocuparse por dirigir el volante, por acelerar y por frenar cuando sea necesario. El pie
izquierdo descansa.
Avance tecnológico
Los coches automáticos se asocian a una mejor tecnología y a avances tecnológicos. La
transmisión automática es necesaria para que funcionen ciertas tecnologías que tienden
hacia el automatismo en los vehículos. Hablamos, por ejemplo, de los sistemas de frenado
de emergencia automáticos o de los controles de velocidad inteligentes que incluyen
función de arranque y de parada.
Son mejores
La técnica de las cajas de cambio automáticas ha mejorado respecto a hace años y ahora
su evolución es tal que asemejan su funcionamiento en gran medida a la de un
conductor humano. Atrás quedan las transmisiones automáticas que no gustaban a
muchos conductores porque mostraban un funcionamiento plano y un comportamiento
aburrido que no seducía a nadie.
Son más populares
Hasta hace poco, el uso de vehículos con cajas de cambios automática se relacionaba con
vehículos de alta gama o con coches que tenían ciertas aspiraciones Premium. Lo cierto
es que en la actualidad se ha vuelto mucho más popular y está presente en cada vez
más coches de gama media y media-baja a medida que su funcionamiento se ha
refinado. Es muy habitual encontrarlo en los coches compactos, pero sobre todo en los
coches deportivos y superdeportivos, donde las transmisiones manuales son ya
minoritarias.
Posibilidad de modo manual
Buena parte de las cajas de cambio automáticas incluyen la posibilidad de un modo
Manual (M) o Secuencial (S) con el que el conductor puede decidir cuándo introducir una
marcha más o menos utilizando la palanca o las levas que se encuentran ubicadas tras el
volante. Es una solución perfecta para los conductores que, en ciertos momentos, desean
mantener el control del cambio de marchas.
Inconvenientes de los coches automáticos
Los vehículos automáticos también presentan algunos inconvenientes o desventajas que
hacen que existan conductores que prefieren los coches manuales. Algunos de estos
inconvenientes son:
Mantenimiento más costoso
Aunque las cajas de cambio automáticas necesitan mantenimiento con menos frecuencia
que las manuales, lo cierto es que tienen más piezas y más componentes electrónicos.
Esto hace que la reparación en caso de avería pueda resultar más costosa.
Normalmente suben la factura de reparación respecto a una caja de cambios manual.
Más consumo
Aunque cada vez existe menos diferencia en el consumo entre transmisiones automáticas
y transmisiones manuales, lo cierto es que las automáticas consumen algo más de
media. Algunos fabricantes están innovando mucho en este sentido y anuncian cajas de
cambio automáticas más eficientes que las manuales en el consumo en los próximos años.
Menos emoción
Conducir un coche automático es menos emocionante que uno manual. El conductor
pierde el vínculo que se crea con el embrague y la palanca y que ha utilizado durante
toda su vida en otros vehículos. Además, el tacto es a veces un poco lento, lo que hace
que se pierda un poco el aspecto más personal de la conducción.
Como se puede apreciar, existen multitud de razones por las que cada vez existen más
vehículos con cajas de cambio automáticas en el mercado. Un cambio que ha llegado para
quedarse entre nosotros y al que nos tendremos que acostumbrar en el futuro